Una viejita de muy avanzada edad, va en el transporte urbano comiendo cacahuates y le dice al pasajero del asiento de adelante:

-¿Joven, quiere cacahuatitos?

El joven responde:

-¡Si claro! Muchas gracias señora

Al poco rato la abuelita vuelve a preguntar:

-¿Quiere más cacahuates joven?

El chico asiente con la cabeza y recibe los cacahuates que la viejecilla le ofrece.

La viejita vuelve a estirar la mano y le dice al joven:

-¿Quieres más cacahuatitos?

El joven apenado contesta:

-Señora, muchas gracias, pero se le van a acabar y luego ¿usted que come?

La abuelita sonriendo contesta:

-No se preocupe jovencito, yo no puedo comerlos porque no tengo dientes, así que sólo los chupo para quitarles el saborcito salado.


CHISTES ANTERIORES DE RISOTERAPIA


¿Fiesta en puerta? CARUDA Canta y Baila, la mejor opción musical ¡Te la recomiendo!